El Museo y Memorial de Auschwitz-Birkenau

Estando en Cracovia y Małopolska, es imposible saltar un lugar importante para los polacos, los judíos y las personas de todas las nacionalidades que han oído sobre la "solución final de la cuestión judía" durante la Segunda Guerra Mundial. Por supuesto, se habla del Memorial y museo Auschwitz-Birkenau.

Clase de la historia viva
Auschwitz y el Birkenau, que fue construido más tarde, fue un lugar donde los alemanes trajeron un gran número de judíos y personas de otras nacionalidades. El campamento se estableció a mediados de 1940. Se estima que aproximadamente 1,1 millones de personas de nacionalidad judía murieron durante el exterminio. El Museo y Memorial de Auschwitz-Birkenau han sido inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Fue el campo de terror y exterminio más grande que operó durante la Segunda Guerra Mundial.
Hoy en día, personas de todo el mundo, los polacos incluidos, pueden visitar el preservado campo principal de Auschwitz. También se va al campo de Birkenau, construido durante la guerra, que está alejado por unos 3 km. Los apartaderos y rampas de ferrocarril originales y reconstruidos de los tiempos 1940-1945, cuando el campamento estaba operando, se han conservado hasta el día de hoy. La ruta turística también pasa por cámaras de gas y cuarteles de prisioneros.
 

Visitando el Memorial y Museo Auschwitz-Birkenau
En la parte museística se han conservado numerosas fotografías y documentos, uniformes a rayas del campamento y pertenencias personales. Se puede comenzar el recorrido en la entrada principal del Museo de Auschwitz-Birkenau. Es aquí donde se transmiten regularmente películas sobre la historia del campamento. Un documental que muestra los momentos de liberación merece atención.
Las visitas turísticas pueden realizarse en grupos organizados o individualmente. Es posible contratar a un guía en el sitio (vale la pena reservarlo con antelación). Este lugar es importante para todos los polacos, judíos, gitanos y personas de todo el mundo. El terror no cubrió solo naciones específicas, aunque se centró principalmente en la población judía europea.
Vale la pena llegar a Oświęcim, cruzar la puerta con la inscripción "El trabajo te hace libre" y reflexionar por un momento sobre el destino de todas las víctimas de la guerra que murieron aquí.

Durante las vacaciones en Cracovia y los alrededores, es imposible perderse una visita a la mina de sal de Wieliczka. Es un lugar perfecto para niños y adultos. ¡Aquí nadie se aburrirá!