Meseta de Cracovia-Czestochowa

No hay que ir a los Tatra o a los Pieninos para experimentar la naturaleza en los alrededores de Cracovia. La Meseta de Cracovia-Częstochowa, también conocido como Jura, es una zona increíblemente rica en valores turísticos. Abundan los atractivos naturales: valles encantadores rodeados de rocas calcáreas, que son un paraíso para los aficionados a la escalada, además de históricos, ya que la zona está salpicada de ruinas de antiguos castillos y fortalezas, denominadas los Nidos de Águila.
Las Meseta debe su carácter único a los procesos geológicos que tuvieron lugar en el lugar durante millones de años, dejando numerosas rocas puntiagudas y cuevas que sobresalen del suelo.
La principal atracción es el Parque Nacional de Ojców, el más pequeño de este tipo de Polonia. Su pequeño tamaño no es en absoluto una desventaja, ya que la zona, relativamente pequeña, ofrece una verdadera pléyade de bellos paisajes y atracciones interesantes. Entre ellas se encuentran las cuevas de Łokietka y Ciemna, que pueden visitarse, o interesantes formaciones rocosas (incluyendo la famosa Maza de Hércules).
Los aficionados a la historia podrán disfrutar de diecisiete edificios medievales, entre ellos los castillos de Ogrodzieniec, Rudno y el castillo de Pieskowa Skała, que se encuentra en un excelente estado de conservación. Caminando por los muros de estos edificios medievales es fácil viajar en el tiempo con la mirada.
Una peculiar atracción en el mapa de la Meseta de Cracovia-Częstochowa es... un desierto. El desierto de Błędowska, que así se llama, es una zona de 33 km² llena de arena. Hay que admitir que es un espectáculo sin precedentes para estas latitudes geográficas.
La Meseta de Cracovia-Czestochowa, con sus numerosos valles y monumentos, es sin duda un lugar que merece la pena descubrir.